sábado, 27 de abril de 2013

Sokcho y Seoraksan

Este fin de semana nos fuimos a Sokcho, una ciudad costera que está al Nordeste, o sea, al ladito de la frontera, uuuuuh
Sokcho es el típico sitio turístico que se peta en verano por las playas pero que cuando hace malo y todavía no hay turistas, es como una ciudad fantasma. Es como ir a Salou en invierno.

Está lleno de "Moteles del amor", que es como le llaman aqui a los hoteles baratos a los que van las parejas, tienen neones de colores y te dan un condón cuando llegas
Doy fe.

Pero una vez superado este choque, te pones a caminar y a investigar, y luego no está tan mal.
La situación es perfecta porque está todo rodeado de mar por un lado, y por las montañas al otro.
  

Las playas no son las mejores del mundo, pero por lo menos pudimos disfrutar del mar, y no había nadie en ningún sitio! 




En Sokcho se dedican a la pesca, y lo más típico es el calamar. Nosotros nos lo comimos, claro, relleno de verduras y fideos, rebozado, frito, y cortado en rodajas. Una maravilla.






A que parece Coruñiña, nos dió una morriña...



En el dique estaban las ajummas, las señoras coreanas, gritándote y tirándote de la manga para que les compres el pescado. Lo tienen ahí en peceras, escoges el que te gusta, te lo cortan, y te lo comes ahí, crudito. Sashimi del fresquito.





Había muchas estrellas de mar, por todas partes, dentro y fuera del agua. La mayoría, muertas fuera.
Se enganchan en los cebos, así que los pescadores las sacan y las dejan ahí

 Hacia el interior nos encontramos con un lago enorme, precioso, lleno de garzas y con un camino todo alrededor.
Se puso a llover, pero pudimos disfrutar de una puesta de sol muy bonita y una luna todavía más increíble.








El sábado fuimos al parque Nacional de Seoraksan, que está a 20 minutos en bus de Sokcho.
Fué una maravilla estar de nuevo en la naturaleza. Eso sí, con miles de coreanos full-equip para hacer senderismo.
Así vayan al parque o a la montaña, se ponen su equipo de montaña marca North Face, Red Face, Polo Neck Face, The Noble Face...Tanto lles da.
Subimos una montaña, que ya le llegaba, nivel medio-alto, y estaba petao de ajummas y señores mayores, niños...yo flipo, los coreanos son unos machotes.
Si a veces en los parques nos encontramos a gente super mayor haciendo flexiones  









Esta montaña se llama Ulsanbawi. Hay una leyenda que cuenta que un Dios llamó a todas las montañas de Corea a unirse y formar la montaña más bonita de Corea, en el Norte. Ulsanbawi recibió ese nombre porque era el pedazo de montaña que representaba a Ulsan, al Sur de Corea. Pero debido a sus picos y su forma tan compleja, se quedó rezagada y cuando llegó ya no había sitio. Entonces se fué a dormir a Seoraksan y se quedó enamorada del paisaje, con lo que decidió quedarse allí.
En el Norte, donde supuestamente debían unirse todas las montañas, está la que dicen es la montaña más bonita de toda Corea.












miércoles, 24 de abril de 2013

Tazas vikingas

El otro día, bueno, como hace dos meses, íbamos paseando y nos encontramos un café donde puedes comprar una taza para pintarla. Te dan pinturas y una libreta, eliges la taza que quieras, y tienes una hora y media para pintarla. Es el típico sitio donde van las parejitas de coreanos. 

 Los jóvenes coreanos, la mayoría, viven con sus padres hasta que se casan, sobre todo las mujeres, así que cuando tienen novio o novia, no tienen ningun sitio donde estar y pasar el rato. Pero Corea te ofrece cantidad de posibilidades para estos casos. Y la mayoría bastante cursis, porque los coreanos son unos cursis, eso está claro. Están los norebangs, que son como los karaokes de toda la vida pero con habitaciones privadas donde te encierras con tus amigos a cantar. También están los cat-cafés, cafés llenos de gatos por todos lados. También hay sitios donde te alquilan una habitación para ver una peli...como el salón de tu casa, pero un poco más cocho. 
Y por supuesto, los famosos Jjimjilbang o saunas, que se componen de varios pisos en los que hay duchas y saunas para mujeres en una parte y para hombres en otra, y luego en un piso está el Jjimjilbang, que es la zona común para hombres y mujeres donde puedes dormir, ver la tele, comer...Esta zona es básicamente una sala enorme con el suelo muy caliente, a veces de mármol, donde hay colchonetas y almohadas de madera. A la entrada de la sauna te dan un pijama rosa, que todo el mundo se pone para estar en esta zona. Los Jjimjilbang no cierran nunca, 24-7 neno.
Puedes ir a dormir por la noche si quieres, es una buena opción después de salir de marcha. De hecho los domingos es mítico ver a la gente ahí sudando la resaca.
Total por 4 euros que cuesta, mejor duermes allí que en tu casa. Mola mazo. 

Pero lo que si que mola mazo, son las tazas que pintamos.
Sobre todo la de Luis, los del café se partían.
Todo el mundo haciendo mariconaditas, el chico dibujaba a la chica, y viceversa. Gatitos, corazones, flores...O hacían un dibujo de ellos vestidos de novios, cada uno en una taza....puaggggg.
 Luis se decantó más por la tendencia vikingo-rockanrolera.  






  
 Y así es como quedaron después de meterlas en el horno.
Es un vicio, queremos más!
 

lunes, 22 de abril de 2013

El jardín del Edén II

El otro día ví un calvo y pensé que era español. 
Era una imagen tan familiar que lo asocié directamente a algo que ya conocía de sobra. Y entonces me dí cuenta, es que aqui no hay calvos!
Por no haber no hay ni canas, pensé que era natural, pero no, se tiñen esos pelasos preciosos coreanos.

Ya hemos empezado a plantar cosas en el jardín, a ver si alegramos un poco el panorama.
Compramos un montón de lechugas que han ido desapareciendo, no se sabe muy bien que es lo que se las come, pero yo me hago una ligera idea...








Pero no sólo tenemos roedores (por decirlo sutilmente y no dañar la sensibilidad del lector), si no que también descubrimos un panal en el tejado. Esto de la primavera en Corea, es un chollo.
Parece que los panales son cosa de los bomberos, así que los llamamos y vinieron enseguida.
Le echaron un spray antibichos y hala! si veis que se vuelven a juntar le echais vosotros, si, fijo.

La putada es que eran avispas, y no abejas, que son bastante más riquiñas.
Espero que no vuelvan.
Ya casi no quedan flores en el árbol, así que ya no tienen excusa.

  


miércoles, 10 de abril de 2013

Cosas preciosas de Japón II



Los carteles, las japonesas en kimono, las geishas, las casitas japonesas, las esculturas de piedra antiguas, 
los árboles, los templos, y por supuesto, las garzas.